En el camino hacia el crecimiento personal vamos dotándonos de una serie de aprendizajes y técnicas que nos permiten desarrollarnos de manera efectiva, potenciar nuestra energía, vitalidad, mentalidad y con ello manejar nuestras emociones de manera asertiva. Hay muchas acciones que podemos implementar para vivir pleno, feliz y próspero. Una de ellas es la gestión en el tiempo a través del proceso de Rise Up. Te invito a conocer de qué se trata este asunto que te permitirá alcanzar la calidad y satisfacción de vida que deseas.
Te hablo de gestión en el tiempo y no de gestión del tiempo porque no podemos gestionarlo, es imposible detenerlo o acelerarlo, pero si podemos gestionarnos a nosotros mismos. Sin embargo, solemos perder el equilibrio por falta de enfoque, planificación y organización para avanzar en todas las áreas de nuestra vida, sin descuidar ninguna.
Para explicarte cómo canalizar la gestión en el tiempo mediante el Rise Up, que es un proceso de empoderamiento y crecimiento personal, primero quiero hablarte del modelo de las tres esferas de influencia, que plantea tres ámbitos a contemplar en nuestra vida: primero el personal, que abarca el tiempo que dedicamos a nosotros mismos, a la salud, a los hobbies, al crecimiento y gestión emocional, entre otros aspectos; segundo las relaciones, ya sean con nuestra pareja, hijos, padres o amigos, con quienes compartimos y nos nutrimos, y tercero el trabajo, que considero debe ser un espacio de crecimiento personal, conectado con un propósito mayor que puede contribuir al mundo.
Usualmente, estas tres esferas suelen estar desequilibradas porque le damos más prioridad a un aspecto en detrimento de otros que también son importantes, que requieren tiempo y dedicación. Es allí donde juega un papel fundamental gestionarte en el tiempo.
¿Cómo gestionarte en el tiempo?
Gestionarte en el tiempo pasa por pensar e identificar ¿cómo estás organizando tu tiempo? ¿En qué situación te encuentras actualmente? ¿A qué le das más prioridad? ¿Qué dejas de lado? ¿Qué consecuencias te trae esto? Teniendo conciencia de ello, te invito a desarrollar la forma para equilibrarnos a través de tres elementos:
- Enfoque: Debes tener presente en qué colocas tu energía. Es fundamental entender que el enfoque debe estar en los resultados que queremos obtener más que en las tareas que realizamos para llegar a ellos.
- La estrategia: cuando nos enfocamos en los resultados logramos mejores estrategias. La estrategia debes basarla en planificación y organización de acciones para la consecución de tus objetivos. Un ejercicio que contribuye a una buena estrategia es darnos un tiempo en las mañanas para revisar si lo que planificamos se corresponde con nuestro enfoque y si nos acerca a los resultados.
- Implementación de la estrategia: aquí es importante partir del ejercicio anterior, pero teniendo una conexión con tu intención, mientras revisas lo que planificaste y haces uso de las herramientas de gestión emocional que te ayudan a empoderarte de certeza para implementar todo lo que planificaste. Hay que evitar la parálisis por análisis, piensas y analizas tanto que no ejecutas.
Ahora, a ejecutar la estrategia
Durante años, en el desarrollo de mis habilidades para gestionar el tiempo he conocido muchos modelos, entre ellos el Método de Planificación Rápida (RPM por sus siglas en inglés) de Anthony Robbins, todos los planteamientos de Robin Sharma, como por ejemplo los de su libro El club de las 5 de la mañana y el método Gettin Things Done (GTD), por señalarte algunos.
El caso es que una vez que pienses e identifiques las cuestiones pertinentes para gestionarte en el tiempo es importante que ejecutes, revises y vayas adaptando la estrategia, teniendo siempre claro tu enfoque. Para ello, te ofrezco algunas ideas orientadores:
- Planificación semanal: particularmente, tengo el hábito de revisar todo lo que voy a generar durante la semana cada domingo. Para ello, me cuestiono: ¿Cómo hago que esta semana sea extraordinaria y cumplir estos objetivos? Y me enfoco en las metas no en las tareas.
- Método 60/10: lo aprendí de Sharman, quien explica que debes tomar 60 minutos para concentrarte en la actividad que desarrollas, poniendo toda tu atención, concentración y sentidos, luego tomas 10 minutos de pausa en los que te relajas, respiras y haces algo diferente para retomar nuevamente el trabajo, con esto echamos a un lado la costumbre de hacer múltiples tareas en un momento con lo cual solemos perder tiempo, esfuerzo y productividad.
- Técnica del setting: todas las mañanas procura que lo primero que hagas sea ajustar y sintonizar tu emoción, tu mentalidad, tu energía e incluso tu espiritualidad con tu intención y más allá de planificar tus metas piensa cómo quieres sentirte durante el día, cómo quieres conectarte contigo mismo y con los demás, con qué nivel de conciencia quieres vivir y con qué energía.
Adicionalmente, te sugiero generar un plan de acción en el que plasmes la nueva forma de administrar tu tiempo. Ten en cuenta que durante este proceso pasarás por tres fases: primero te sentirás incómodo y desequilibrado porque estás saliendo de tu zona de confort (21 días aproximadamente), luego vendrá un intermedio en el que percibirás un caos y posteriormente empezarás a sentirte cómodo, todo fluye y disfrutas los beneficios de tus nuevos hábitos.
Aplica estas sencillas técnicas y verás cómo poco a poco vas a ir ordenando tu sistema.