¿Has estado en encuentros digitales en los que la mayoría de personas mantiene sus cámaras apagadas?
¿Te ha pasado que participas en reuniones virtuales en las que sientes que estás viendo un video?
¿Te has conectado porque te interesa mucho un tema y luego no le prestas atención?
Ocurre que la monotonía se ha apoderado de los entornos digitales y los malos hábitos afectan la comunicación creando experiencias de poco impacto en la audiencia.
Aunque hace algún tiempo conocíamos sobre la cultura digital, durante el último año hemos pasado inmersos en ella forzados de alguna manera a entrar en esta dinámica, que difiere de la presencial porque tiene sus propias reglas, valores, normas y códigos.
Malos hábitos en las experiencias virtuales:
Si quieres conectar, influir e impactar en tu audiencia identifica los malos hábitos que pueden estar afectando la manera en tu comunicación en los entornos virtuales.
- Monotonía: Es muy habitual, generalmente se produce porque el ponente entabla un monólogo que impide intervenir a nadie más.
- Exceso de sobriedad: Ese paradigma de la comunicación que apunta a que debemos ser serenos, sobrios y transmitir la información adecuada, en el tiempo adecuado a la persona adecuada, nos presentamos como personas perfectas, lo que no es real.
- Ausencia de emociones: La emoción es uno de los factores más importantes para generar aprendizaje, cuando fallamos en esto las personas no se involucran en lo que sucede y ocurre lo que yo llamaría el síndrome de la radio: se conectan a un webinar, apagan la cámara mientras revisan su celular, navegan en internet, miran contenidos en redes sociales o hablan con otras personas mientras escuchan.
- No prender la cámara: Esta mala práctica genera incomodidad al ponente y resta aprendizaje al espectador. Si eres participante es importante que prendas la cámara por respeto al expositor.
Barreras que afectan la comunicación virtual
El desafío más grande del ser humano es mostrarse tal cual es, decir lo que piensa sin sentir ni vergüenza ni complejos por el qué dirán. De allí, surge el temor de hablar en público, que es el segundo miedo más grande del ser humano, el primero es morir.
Las 3 barreras más frecuentes que entorpecen la comunicación, incluso en los entornos virtuales:
- Sentirnos expuestos.
- Sentirnos torpes (generalmente más en la habilidad motora al desconocer el manejo de las herramientas tecnológicas).
- Sentirnos desconectados.
Aplica estos 4 buenos hábitos
Para derribar las barreras y dar valor agregado a tu comunicación hay buenas prácticas que te permitirán alcanzar resultados efectivos y potenciar tus experiencias digitales.
- Conéctate con tu vulnerabilidad: Aprende a conectarte con ella, muéstrate tal como eres, eso te hará extraordinario. Ahora el desafío no es ser el mejor sino ser diferente, si creas algo distinto difícilmente tendrás competencia.
- Cuenta tu historia: Una de las mejores formas de diferenciarte es contando tu historia. Puedes ganar el respeto de tu audiencia por tu contenido, pero se enamorarán de ti y te recordarán por tu historia.
- Muéstrate natural: Vivimos momentos donde queremos conexiones reales, estamos hartos de lo ficticio. Lo que más busca la gente es honestidad, eso genera confianza, se valora mucho que una persona muestre su esencia. Algo favorable de esta coyuntura actual es que nos exhibe reales en nuestra casa, con la familia, mascotas, plantas, con lo que ocurre de manera imprevista.
- Enfócate en cómo transmites: Más allá de priorizar lo que transmites, enfócate en cómo lo haces. La forma debe ser completamente diferente y para ello tienes que asumir riesgos, hacer cosas nuevas aunque en principio, te causen incomodidad.
Además de estos hábitos, existen 4 eslabones que puedes unir para para que alcances una comunicación efectiva y poderosa en entornos virtuales.
Cuando aprendemos algo nuevo cambiamos nuestro mundo y cuando lo cambiamos estamos listos para nuevos aprendizajes. Te invitamos a aplicar esta información tanto en los negocios como en tu vida personal.
Si te gustó este artículo compártelo en tus redes sociales.